El estadio Metropolitano pareció este martes un horno hirviendo, en el que la cocinada fue Colombia. En un infernal calor en Barranquilla, Argentina jugó con ventilador y se llevó la victoria 1-2, de la mano de Lionel Messi, en la cuarta fecha de la eliminatoria suramericana del Mundial de Brasil-2014.
En esa caldera a fuego alto, Colombia alcanzó a ilusionar, tuvo un primer tiempo ponderable, pero un segundo para el olvido y se quemó en su propio horno. En la cancha, Argentina no se achicharró por el calor. Al contrario, corrió y dominó guiada por Messi, quien se paseó con aire acondicionado incorporado. El ‘10’ dejaba rivales en el suelo, parecía inalcanzable. En la tribuna, el público se confundió entre rechiflas y aplausos de admiración.
Colombia, con orden en el primer tiempo, con paciencia y ambición, aceleró en el momento justo. Una falta sobre James Rodríguez al borde del área era la primera gran opción del partido. Dorlan Pabón sacó un misil que se desvió en Mascherano y penetró en la red, para el festejo colombiano, 1-0 en 44 minutos.
Pero en la segunda parte, Colombia vivió un infierno. Argentina recibió un impulso de energía con la entrada de Sergio el 'Kun' Agüero. La temperatura bajó y Messi enfrió la caldera con el gol del empate. Él inició la jugada, se combinó con Higuaín, que cruzó el balón al área, y en una estrellada desafortunada de David Ospina con Mario Yepes, apareció el mejor del mundo para poner su selló: 1-1 a los 15 minutos.
Dairo Moreno fue de inmediato a la cancha por Pabón, pero Messi, Agüero e Higuaín hacían estragos. ¡Cambio, cambio! gritó la tribuna. A los 30 minutos entraron Diego Arias y Darwin Quintero, por Aguilar y Jackson, respectivamente, pero fueron inofensivos.
A seis minutos del final, Argentina sentenció el juego. Remate de Higuaín, soltó Ospina, y Agüero, oportuno, marcó el segundó. El gol apagó la hoguera, la ilusión se desvaneció, Barranquilla se enfrió y Colombia se quemó en su propio horno. La selección argentina, de la mano de Lionel Messi, derrotó 2-1 a Colombia como visitante, un resultado con el que calló las críticas después de empatar como local frente a Bolivia.
A Colombia, al contrario, se le cayó la estantería después de haberle ganado a Bolivia, en La Paz, en la jornada inicial, y el triunfo en la altura paceña ahora no sirve, no marca diferencia, porque en Barranquilla, y bajo, un calor infernal, la Selección quedó achicharrada.
EFE
En esa caldera a fuego alto, Colombia alcanzó a ilusionar, tuvo un primer tiempo ponderable, pero un segundo para el olvido y se quemó en su propio horno. En la cancha, Argentina no se achicharró por el calor. Al contrario, corrió y dominó guiada por Messi, quien se paseó con aire acondicionado incorporado. El ‘10’ dejaba rivales en el suelo, parecía inalcanzable. En la tribuna, el público se confundió entre rechiflas y aplausos de admiración.
Colombia, con orden en el primer tiempo, con paciencia y ambición, aceleró en el momento justo. Una falta sobre James Rodríguez al borde del área era la primera gran opción del partido. Dorlan Pabón sacó un misil que se desvió en Mascherano y penetró en la red, para el festejo colombiano, 1-0 en 44 minutos.
Pero en la segunda parte, Colombia vivió un infierno. Argentina recibió un impulso de energía con la entrada de Sergio el 'Kun' Agüero. La temperatura bajó y Messi enfrió la caldera con el gol del empate. Él inició la jugada, se combinó con Higuaín, que cruzó el balón al área, y en una estrellada desafortunada de David Ospina con Mario Yepes, apareció el mejor del mundo para poner su selló: 1-1 a los 15 minutos.
Dairo Moreno fue de inmediato a la cancha por Pabón, pero Messi, Agüero e Higuaín hacían estragos. ¡Cambio, cambio! gritó la tribuna. A los 30 minutos entraron Diego Arias y Darwin Quintero, por Aguilar y Jackson, respectivamente, pero fueron inofensivos.
A seis minutos del final, Argentina sentenció el juego. Remate de Higuaín, soltó Ospina, y Agüero, oportuno, marcó el segundó. El gol apagó la hoguera, la ilusión se desvaneció, Barranquilla se enfrió y Colombia se quemó en su propio horno. La selección argentina, de la mano de Lionel Messi, derrotó 2-1 a Colombia como visitante, un resultado con el que calló las críticas después de empatar como local frente a Bolivia.
A Colombia, al contrario, se le cayó la estantería después de haberle ganado a Bolivia, en La Paz, en la jornada inicial, y el triunfo en la altura paceña ahora no sirve, no marca diferencia, porque en Barranquilla, y bajo, un calor infernal, la Selección quedó achicharrada.
EFE
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