La crónica de una gran hincha azul y amiga de Noticias Millos.
-Crónica
Los domingos suelo despertarme pasadas las 10 de la mañana, pero aquel 16 de diciembre....
El reloj aún no marcaba las 4 am, cuando mis ganas de dormir habían desaparecido, desaparecieron por que un sueño no dejaba seguir, por que un sueño tenia ocupada mi cabeza, el sueño de la 14 se había apoderado de mi, y como la ultima semana la ansiedad no me dejaba vivir normalmente. En el TV pasaban la final del mundial de clubes y ver al Corinthians celebrando un campeonato no ayudaba con mi ansiedad, dos películas mas (malas por cierto) me ayudaban a pasar la madrugada de aquel 16.
Me salí de la cama y como cada día desde que la había adquirido, lo primero que hice fue revisar que la boleta aun estuviera en el sitio que la había dejado, comencé a alistarme: algo nuevo, algo viejo, algo prestado y algo azul, OK es algo que usan para la buena suerte el día del matrimonio, dicen que el día en que van a casarse es el día mas feliz de la vida, pues para mi este día seguramente seria el día mas feliz de mi vida así que decidí usar este agüero unas medias nuevas, mi Jean mas viejo, un buso manga larga que era de mi prima, y mi camiseta, mi alma, mi corazón y mi sangre AZUL. No eran ni las 8 y yo ya estaba lista para irme para el estadio, mi hermano llego a mi apartamento por que la mujer ya se había ido a trabajar, íbamos a pasar la ansiedad juntos, me dijo (casi obligándome) que saliéramos a desayunar, ocho días antes cuando jugábamos contra el junior no había comido nada por la ansiedad, al igual que el día del partido de ida en Medellín, así que no el no iba a permitir que pasara un día mas sin comer. El resto de la mañana la pasamos jugando con la cabeza de mi hermano mientras se pasaba la maquina "0", entre intentos de estrellas dibujadas en su cabeza, las risas hacían que pasara el tiempo.
12 del día y mi nivel de ansiedad aumentaba no aguantaba mas, salí para el estadio, Bogotá vestía de azul, por todos lados habían camisas, banderas, carros que pitaban celebrando estar en la final, esperando el ansiado momento; camino al estadio veia niños de brazos, adultos mayores, hombres, mujeres y hasta perros vestidos con la camiteta del mas grande, de los alrededores del Nemesio ni hablar, las caras de ilusión no se escondían caras pintadas, tatuajes temporales de escudos con la 14, camisetas de todos los gustos la 2012, la conmemorativa, la del Dorado.... y hasta la del 88. Era la 1:30 y yo ya estaba dentro del estadio sentada en el mismo lugar que me a recibido los últimos años, debo confesar que cuando entró la copa una lagrima rodó por mi mejilla, no veía la hora que esa copa la levantara MILLOS; a las 2:30 lateral norte estaba ya casi llena, y yo estaba desesperada por que mi hermano y mi cuñada nada que llegaba, no iba a poder guardar los puestos mucho tiempo mas... finalmente llegaron, y el resto de la tarde hablamos de nuestro tema favorito, Fútbol, seguíamos el partido de Barcelona-Atlético Madrid por Twitter, conversábamos sobre la formación para el partido...Etc.
Al fin salían los equipos, al fin llegaba el momento, ese que habíamos esperado por años, majestuoso recibimiento el que se le hizo al embajador "Millos por la 14" decía oriental, papelitos volando por las laterales, bombas azules y blancas por todas las localidades, y humo azul desde la cancha. nuestra hermosa bandera bajaba mientras se escuchaban los himnos y el Bogotá, Bogotá, Bogotá retumbaba en la capital entera.
Pasaban los minutos y los cantos en las tribunas no paraban, los nervios eran evidentes en hinchas y jugadores, pero antes del termino del primer tiempo el grito de Gol apareció en el Campín, Cosme nos acercaba aun mas al sueño, un amigo me decía "chatica, estamos mas cerca". en el segundo tiempo Medellín anoto también y lejos de dejar el estadio en silencio, los cantos de apoyo eran mas fuerte y sentidos, así termino el partido con empate a un gol, y una final sentenciada a los lanzamientos desde el punto penal.
mis manos temblaban, sudaba frió un escalofrió pasaba por todo mi cuerpo, estábamos tan cerca pero tan lejos de la 14. comenzaban los penaltis y las caras a mi alrededor eran cada vez de mas angustia. Medellín perdió un tiro, y sentimos media estrella en nuestras manos, aunque... algunos tiros mas tarde cuando perdimos el penal nosotros no sabíamos ni que pensar, aunque quizá debía ser así estaba destinado a un gran héroe este campeonato, se habían terminado los 5, y ahora tocaba uno a uno, a muerte súbita cobraba Delgado con propiedad anotaba, desde ese momento en mi cabeza la película rueda en cámara lenta, veo a Delgado caminar con seguridad hacia el arco, al jugador rival tomar el balón cobrar, y a nuestro arquero volando a su izquierda, veo el balón rebotando luego de tropezarse con las manos de Luis, eramos campeones, el sueño se había cumplido, 24 años (toda una vida) de espera había terminado, mis piernas no pudieron ni sostenerme quedaba yo de rodillas en lateral norte, llorando, agradeciéndole a Dios, a la vida y a MILLOS permitirme vivir este momento. Mi hermano, mi cuñada y un amigo también con lagrimas en los ojos se agacharon a recogerme y fundidos en un abrazo gritábamos y celebrábamos ser Campeón, ser "El mas veces campeón".
Levantar la copa,dar la vuelta olímpica el piscinaso de los jugadores en arco norte,todo fue una gran fiesta. Los años en que el mas grande de Colombia se había coronado campeón empezaban a salir el la pantalla del estadio, a estos años se sumaba el 2012, a esas 13 estrellas que nos enorgullece siempre se le sumaba una mas, se le sumaba la ansiada, amada y esperada 14. las lagrimas no terminaban a mi alrededor, estaban los que casi siempre veíamos los mismos muchachos con los que compartimos muchos partidos, por mi cabeza pasaban todos esos momentos de alegrías y de tristezas que había vivido en el Campín, esas noches de frió cuando a norte solo entrabamos abonados, esos goles que nos hacían celebrar, esos momentos que hacían salir del alma las mas desenfrenadas celebraciones y las mas duras tristezas. Aquel 16 de diciembre... fue el gran día, un día que no olvidare, un día que para los hinchas azules jamas saldrá de nuestras mentes, aquel 16 de diciembre... fue el día mas feliz de mi vida.
Mis manos aun tiemblan escribiendo estas lineas, aun siento un escalofrio por todo el cuerpo, aun las lagrimas salen y recorren mis mejillas, todo por que soy hincha del equipo mas grande de este mundo, todo por que SOY MAS VECES CAMPEON. #GraciasMILLOS #EstaCampañaVolvereAEstarContigo
Cortesía: @Jinirubio
-Crónica
Los domingos suelo despertarme pasadas las 10 de la mañana, pero aquel 16 de diciembre....
El reloj aún no marcaba las 4 am, cuando mis ganas de dormir habían desaparecido, desaparecieron por que un sueño no dejaba seguir, por que un sueño tenia ocupada mi cabeza, el sueño de la 14 se había apoderado de mi, y como la ultima semana la ansiedad no me dejaba vivir normalmente. En el TV pasaban la final del mundial de clubes y ver al Corinthians celebrando un campeonato no ayudaba con mi ansiedad, dos películas mas (malas por cierto) me ayudaban a pasar la madrugada de aquel 16.
Me salí de la cama y como cada día desde que la había adquirido, lo primero que hice fue revisar que la boleta aun estuviera en el sitio que la había dejado, comencé a alistarme: algo nuevo, algo viejo, algo prestado y algo azul, OK es algo que usan para la buena suerte el día del matrimonio, dicen que el día en que van a casarse es el día mas feliz de la vida, pues para mi este día seguramente seria el día mas feliz de mi vida así que decidí usar este agüero unas medias nuevas, mi Jean mas viejo, un buso manga larga que era de mi prima, y mi camiseta, mi alma, mi corazón y mi sangre AZUL. No eran ni las 8 y yo ya estaba lista para irme para el estadio, mi hermano llego a mi apartamento por que la mujer ya se había ido a trabajar, íbamos a pasar la ansiedad juntos, me dijo (casi obligándome) que saliéramos a desayunar, ocho días antes cuando jugábamos contra el junior no había comido nada por la ansiedad, al igual que el día del partido de ida en Medellín, así que no el no iba a permitir que pasara un día mas sin comer. El resto de la mañana la pasamos jugando con la cabeza de mi hermano mientras se pasaba la maquina "0", entre intentos de estrellas dibujadas en su cabeza, las risas hacían que pasara el tiempo.
12 del día y mi nivel de ansiedad aumentaba no aguantaba mas, salí para el estadio, Bogotá vestía de azul, por todos lados habían camisas, banderas, carros que pitaban celebrando estar en la final, esperando el ansiado momento; camino al estadio veia niños de brazos, adultos mayores, hombres, mujeres y hasta perros vestidos con la camiteta del mas grande, de los alrededores del Nemesio ni hablar, las caras de ilusión no se escondían caras pintadas, tatuajes temporales de escudos con la 14, camisetas de todos los gustos la 2012, la conmemorativa, la del Dorado.... y hasta la del 88. Era la 1:30 y yo ya estaba dentro del estadio sentada en el mismo lugar que me a recibido los últimos años, debo confesar que cuando entró la copa una lagrima rodó por mi mejilla, no veía la hora que esa copa la levantara MILLOS; a las 2:30 lateral norte estaba ya casi llena, y yo estaba desesperada por que mi hermano y mi cuñada nada que llegaba, no iba a poder guardar los puestos mucho tiempo mas... finalmente llegaron, y el resto de la tarde hablamos de nuestro tema favorito, Fútbol, seguíamos el partido de Barcelona-Atlético Madrid por Twitter, conversábamos sobre la formación para el partido...Etc.
Al fin salían los equipos, al fin llegaba el momento, ese que habíamos esperado por años, majestuoso recibimiento el que se le hizo al embajador "Millos por la 14" decía oriental, papelitos volando por las laterales, bombas azules y blancas por todas las localidades, y humo azul desde la cancha. nuestra hermosa bandera bajaba mientras se escuchaban los himnos y el Bogotá, Bogotá, Bogotá retumbaba en la capital entera.
Pasaban los minutos y los cantos en las tribunas no paraban, los nervios eran evidentes en hinchas y jugadores, pero antes del termino del primer tiempo el grito de Gol apareció en el Campín, Cosme nos acercaba aun mas al sueño, un amigo me decía "chatica, estamos mas cerca". en el segundo tiempo Medellín anoto también y lejos de dejar el estadio en silencio, los cantos de apoyo eran mas fuerte y sentidos, así termino el partido con empate a un gol, y una final sentenciada a los lanzamientos desde el punto penal.
mis manos temblaban, sudaba frió un escalofrió pasaba por todo mi cuerpo, estábamos tan cerca pero tan lejos de la 14. comenzaban los penaltis y las caras a mi alrededor eran cada vez de mas angustia. Medellín perdió un tiro, y sentimos media estrella en nuestras manos, aunque... algunos tiros mas tarde cuando perdimos el penal nosotros no sabíamos ni que pensar, aunque quizá debía ser así estaba destinado a un gran héroe este campeonato, se habían terminado los 5, y ahora tocaba uno a uno, a muerte súbita cobraba Delgado con propiedad anotaba, desde ese momento en mi cabeza la película rueda en cámara lenta, veo a Delgado caminar con seguridad hacia el arco, al jugador rival tomar el balón cobrar, y a nuestro arquero volando a su izquierda, veo el balón rebotando luego de tropezarse con las manos de Luis, eramos campeones, el sueño se había cumplido, 24 años (toda una vida) de espera había terminado, mis piernas no pudieron ni sostenerme quedaba yo de rodillas en lateral norte, llorando, agradeciéndole a Dios, a la vida y a MILLOS permitirme vivir este momento. Mi hermano, mi cuñada y un amigo también con lagrimas en los ojos se agacharon a recogerme y fundidos en un abrazo gritábamos y celebrábamos ser Campeón, ser "El mas veces campeón".
Levantar la copa,dar la vuelta olímpica el piscinaso de los jugadores en arco norte,todo fue una gran fiesta. Los años en que el mas grande de Colombia se había coronado campeón empezaban a salir el la pantalla del estadio, a estos años se sumaba el 2012, a esas 13 estrellas que nos enorgullece siempre se le sumaba una mas, se le sumaba la ansiada, amada y esperada 14. las lagrimas no terminaban a mi alrededor, estaban los que casi siempre veíamos los mismos muchachos con los que compartimos muchos partidos, por mi cabeza pasaban todos esos momentos de alegrías y de tristezas que había vivido en el Campín, esas noches de frió cuando a norte solo entrabamos abonados, esos goles que nos hacían celebrar, esos momentos que hacían salir del alma las mas desenfrenadas celebraciones y las mas duras tristezas. Aquel 16 de diciembre... fue el gran día, un día que no olvidare, un día que para los hinchas azules jamas saldrá de nuestras mentes, aquel 16 de diciembre... fue el día mas feliz de mi vida.
Mis manos aun tiemblan escribiendo estas lineas, aun siento un escalofrio por todo el cuerpo, aun las lagrimas salen y recorren mis mejillas, todo por que soy hincha del equipo mas grande de este mundo, todo por que SOY MAS VECES CAMPEON. #GraciasMILLOS #EstaCampañaVolvereAEstarContigo
Cortesía: @Jinirubio
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1 comentarios:
Chatica: Tengo dos maravillosos y AZULES hijos que no habían visto a MILLOS campeón. Ese maravilloso Domingo lo vivimos en el estadio y luego en el Simón...Uds;los hinchas jóvenes y nosotros los "mayorcitos" somos muy afortunados de amar al mas GRANDE...Esperemos que lo que viene sea igual o mejor...felicitaciones y gracias por tu crónica.
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